
“La fe mueve montañas”, es una frase común inspirada en un versículo de «La Biblia» (Mateo 17:20), que narra el encuentro de Jesús y sus discípulos con un hombre que les pide ayuda para su hijo.
Esa unión característica del cristianismo es la que constataron los creadores de la serie «The Chosen» («Los elegidos»), quienes en 2017 buscaron el auxilio de gente común para realizar una serie sobre la vida de Cristo, ya que no contaban con el apoyo económico de algún gran estudio.
Ese año, lanzaron una página para recabar dinero (algo conocido como crowdfunding) y la respuesta sorprendió: En 2021, ya habían recaudado 40 millones de dólares; hoy van en la cuarta temporada.
“Soñábamos en contar una historia para todos, no es para personas mayores o sólo para jóvenes, ni ricos o pobres; estábamos seguros de que esta, que es la historia más grande jamás contada, podría impactar sin importar a quién, y me parece que eso le dio el éxito”, dice Jonathan Roumie, actor que recrea a Jesucristo.
La serie, que puede ser vista en el sitio (thechosen.es) y en sus primeras tres temporadas en Netflix, es distribuida por Angel Studios, mismo que impulsó el año pasado la cinta Sound of freedom (Sonido de libertad), producida por el mexicano Eduardo Verástegui.
El proceso de mecenazgo, que continúa hasta la fecha, se ha dado de la siguiente manera: los capítulos se pueden ver gratuitamente en su propia app y, a cambio, se les pide a los espectadores que devuelvan la “contribución” para garantizar futuras temporadas.
“La magia de esta serie es que está hecha por y para seres humanos, y por eso los personajes se perciben así. Esas historias las hemos escuchado mil veces pero quizás no siempre se proyecten como personas comunes; no verlos como santos o divinidades”, señala la peruana Vanessa Benavente, quien da vida a la Madre María.
La serie, que hoy estrena el primer y segundo capítulo de la cuarta temporada en cines, ha superado al día de hoy más de 100 millones de dólares de recaudación y 600 millones de vistas de episodios en 175 países, según datos de la producción.
Fuente tomada de EL UNIVERSAL